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Trabajando para sumarle vida a los días de los niños con diagnóstico médico terminal

Cuando no es posible sumarle días a la vida de los niños, siempre es posible sumarle vida a sus días. Ese es el norte de nuestro trabajo en Casa Khuyana. Somos una asociación civil sin fines de lucro que creó, en el corazón del Valle Sagrado de los Incas, Cusco, el primer hospice pediátrico de Perú y el tercero de Latinoamérica. Pronto abriremos las puertas para brindar cuidados paliativos pediátricos a niños con diagnóstico médico terminal y sus familias. No lo podemos hacer solos, ellos necesitan de tí.

Mónica Pfeiffer, nuestra fundadora y directora, cobija desde hace años una firme convicción: acompañar a niños y sus familias en un trayecto tan trascendental de la vida como el que se inicia al recibir un diagnóstico médico terminal. Aunque parezca lo contrario, incluso en ese momento se trata de enfocarse en vivir, de comprometerse con que lo hagan de la manera más amorosa y armoniosa posible. Acceder a cuidados paliativos pediátricos y contención es un derecho fundamental de los niños.

Justamente, un hospice pediátrico es un hogar donde se brinda este tipo de cuidados y acompañamiento emocional, social y espiritual a niños con un diagnóstico médico terminal y sus familias. Que exista en Perú es de gran importancia sociosanitaria, ya que, y sólo por citar una de las muchas enfermedades que pueden derivar en un diagnóstico médico terminal, según datos de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), en el país alrededor de 1800 niños y adolescentes son diagnosticados cada año con cáncer, y más de 400 reciben un diagnóstico médico terminal.

Una vez que finalicemos la construcción -¡estamos trabajando duro en la última etapa y el equipamiento!- y abramos nuestras puertas, brindaremos cuidados paliativos pediátricos a partir de un equipo interdisciplinario que estamos conformando, del que serán parte un médico paliativista pediátrico, enfermeras, trabajadores sociales, terapeutas, psicólogos, tanatólogos, acompañantes espirituales y voluntarios entrenados.

En Casa Khuyana todos los servicios podrán ser gratuitos para los niños y sus familias ya que son financiados en su totalidad por la organización a partir de los aportes y donaciones de toda la sociedad. La participación de todos es, ni más ni menos, lo que hará posible que cumplamos nuestra misión de sumarle vida a los días de los niños a los que les daremos hogar. Ellos cuentan contigo.

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